La magia de un instante

La magia de un instante

sábado, 21 de febrero de 2015

Ha pasado el tiempo...

 
 
 
 Vuelvo al blog... Solamente ha pasado un instante, casi tres años en un instante. Han sucedido muchas cosas en mi vida, tristezas y alegrías, pero nada que no pueda curar el tiempo.

Siempre necesito tiempo, para organizarme, para encauzar mis inquietudes, para pararlo en un momento dado e inmortalizarlo en una fotografía. Necesito un tiempo para pensar, para llorar y reir y conseguir paz y equilibrio en mis pensamientos. Todo fluye muy rápido, mis sentimientos siempre se anteponen a otras circunstancias y muchas veces me producen daño, pero quiero vivir el instante, el presente siempre me depara algo hermoso y quiero disfrutarlo. Solo necesito tiempo...

Regreso en la época del almendro en flor, esa flor que se transformará en fruto. En el árbol todavía queda la almendra vieja, la que se resiste a caer ante la nueva generación. Conviven pasado y presente, la naturaleza es sabia y completa los ciclos... otra vez el tiempo es el que se encarga de madurar ese fruto para alimentar nuestro cuerpo. Necesito tiempo para alimentar mi alma.

                 
 
Tiempo sin tiempo
 
 
Preciso tiempo necesito ese tiempo
que otros dejan abandonado
porque les sobra o ya no saben
que hacer con él
tiempo
en blanco
en rojo
en verde
hasta en castaño oscuro
no me importa el color
cándido tiempo
que yo no puedo abrir
y cerrar
como una puerta

tiempo para mirar un árbol un farol
para andar por el filo del descanso
para pensar qué bien hoy es invierno
para morir un poco
y nacer enseguida
y para darme cuenta
y para darme cuerda
preciso tiempo el necesario para
chapotear unas horas en la vida
y para investigar por qué estoy triste
y acostumbrarme a mi esqueleto antiguo

tiempo para esconderme
en el canto de un gallo
y para reaparecer
en un relincho
y para estar al día
para estar a la noche
tiempo sin recato y sin reloj

vale decir preciso
o sea necesito
digamos me hace falta
tiempo sin tiempo.
 
 
Mario Benedetti

 

jueves, 12 de abril de 2012

Mariposa




Quisiera
hacer un verso que tuviera
ritmo de Primavera;
que fuera
como una fina mariposa rara,
como una mariposa que volara
sobre tu vida, y cándida y ligera
revolara
sobre tu cuerpo cálido de cálida palmera
y al fin su vuelo absurdo reposara
--tal como en una roca azul de la pradera--
sobre la linda rosa de tu cara...

Quisiera
hacer un verso que tuviera
toda la fragancia de la Primavera
y que cual una mariposa rara
revolara
sobre tu vida, sobre tu cuerpo, sobre tu cara.




 


domingo, 8 de abril de 2012

Gotas de lluvia en crisálida

Hoy la lluvia dejó sus lágrimas en las crisálidas de la mariposa monarca. Momentos antes acababa de nacer un precioso macho, con los colores de sus alas vivos y brillantes, pero esta mariposa monarca estaba destinada a no volar, sus alas no se formaron bien y nacieron pequeñas y arrugadas. Le estaba haciendo un seguimiento pues desde que era gusano, su primera muda de piel fue traumática y le costó salir, dejando una huella en su abdomen que se repitió en las cuatro mudas de piel restante.

En la de la imagen ya se pueden apreciar sus alas, seguro que su metamorfosis finalizará bien y volará libre.

viernes, 6 de abril de 2012

Agradecimiento

Hoy escribo para agradecer a mi amiga Isa, su retrato. Es un retrato literario, sobre mí, cuando comenzaba mi incursión en la fotografía y no quería que nada escapara a mi ojo, a ese instante mágico que no queremos perder y que para conseguirlo nos olvidamos del mundo que nos rodea.

Isa me vió así, tal y como yo me sentía en ese momento, absorta y pensativa, paciente y observadora, esperando que una garza decida pescar y a lo lejos averiguar por su posición, al acecho (como un gato), cuando se va a lanzar en busca de su bocado.

Gracias Isa, han pasado solamente tres años del regalo de tu relato y me sigo sintiendo así. No he llegado a ser una artista, pero sí estoy contenta con lo que he conseguido y amo la Fotografía como el primer día.

Aquí pueden ver el relato http://7cascabeles.blogspot.com.es/2012/04/el-amanecer-de-una-artista.html y leer otros relatos cortos que escribe mi amiga Isabel Machín en su blog "Al otro lado de los libros".

miércoles, 4 de abril de 2012

Tiempo de cambios


Homenaje a Mario Benedetti

Chau número tres


Te dejo con tu vida
tu trabajo
tu gente
con tus puestas de sol
y tus amaneceres.

Sembrando tu confianza
te dejo junto al mundo
derrotando imposibles
segura sin seguro.

Te dejo frente al mar
descifrándote sola
sin mi pregunta a ciegas
sin mi respuesta rota.

Te dejo sin mis dudas
pobres y malheridas
sin mis inmadureces
sin mi veteranía.

Pero tampoco creas
a pie juntillas todo
no creas nunca creas
este falso abandono.

Estaré donde menos
lo esperes
por ejemplo
en un árbol añoso
de oscuros cabeceos.

Estaré en un lejano
horizonte sin horas
en la huella del tacto
en tu sombra y mi sombra.

Estaré repartido
en cuatro o cinco pibes
de esos que vos mirás
y enseguida te siguen.

Y ojalá pueda estar
de tu sueño en la red
esperando tus ojos
y mirándote.